© Fernando Sarabia
Mujer, voy buscando tu inocencia,
esa sonrisa tan sincera
de tus tiernos labios
que han minado mis entrañas.
Enriquecidas vivencias
que engrandecen mis recuerdos,
tú no sabes, tú no aprecias
lo que digo, lo que siento.
Lo que olvido en mi tintero
que no escribo que me guardo,
que comparto en mis adentros
que me callo por orgullo
y que quisiera recitar.
Dile que mi amor
no ha dejado de latir
por un momento,
que mi vida sigue fiel
a la imagen que dejó.
Nunca se sabrá
lo que he sido, lo que he dado
por ese amor
que desnudo lo abracé
que de pronto se me fue.
Mujer, hoy escucho malas lenguas
que rodean tu figura,
tan hermosa tan lucida,
que los años te castigan.
Las tormentas en problemas
van pesando en tu camino,
yo quisiera que atracaras
en mi puerto tus fatigas.
Busco a alguien que comprenda,
estas palabras alocadas
que permitan a mi mente
refrescar con suave brisa,
esta canción que la persigue.
Dile que mi amor
no ha dejado de latir
por un momento,
que mi vida sigue fiel
a la imagen que dejó.
Nunca se sabrá
lo que he sido lo que he dado,
por ese amor
que desnudo lo abracé
que de pronto se me fue.
Mujer